Es difícil decir las palabras sin un poco de tristeza, mi
amigo se ha ido, hace unos días él murió de complicaciones de la misma
enfermedad que casi me mató hace años atrás, la neumonía... es difícil
encontrar un amigo, y mucho más un buen amigo, y mucho más difícil encontrar un
mejor amigo, pero este amigo mío era sacerdote.
Cada persona en este mundo vive con los poderes que quieren
tu ruina, poderes que te empujan contra las cuerdas, poderes que empujan su
agenda malvada con fuerza o sutileza a diario, pero cuando encuentras a la
persona adecuada en este lioso mundo, alguien que pelea como tú contra esos
poderes para salvar a más personas y tratar ellos de llegar a Dios para poder
salvarse, eso de por sí es un milagro. Cuando esa persona es tú Pastor, uno
agradece a Dios por el don de tener a un sacerdote como tu mejor amigo.
El Reverendo Edward Wal fue tal amigo, luchó contra el
obispo pro homosexual Robert Lynch de muchas maneras y tal vez perdió muchas de
esas batallas porque Lynch era su jefe y él tenía voto de obediencia, mi amigo
nunca me reveló ninguna de las cosas que el Obispo pro-gay Lynch le hizo, pero
yo estaba seguro de que era una crucifixión, una carnicería, un linchamiento
directo.
Eddy recibió de sus obispos amigos un mensaje de protección,
diciéndole que huyera de ese Judas perverso y se pusiera a salvo dentro de las
alas santas de dichos Obispos amigos, pero el padre Wal no lo hizo, prefirió quedarse
y no le importó los espías en su propia Iglesia alertando a Lynch sobre todo lo
que hacía y decía, muchas veces fue llamado a comparecer ante el
"Obispo" por algunos "cargos" que luego fueron retirados,
supongo que abrazó la mortificación de tener su propio tribunal de Fariseos y
recibió felizmente la excoriación.
El Padre Wal no era un hombre perfecto, pero estaba tratando
de serlo. Nació en Polonia, sufrió la era comunista, lo describió como un
"mal momento", amó al Perú y cada segundo que vivió allá y amó su
cocina encantadora, desafortunadamente los sacerdotes los mueven y a él lo
cambiaron a San Petersburgo, Florida, unos años más tarde nos encontramos.
Allá fue feliz de construir una residencia para ancianos en
la propiedad de la Iglesia, quería comenzar un programa con tecnología impartiendo la misa para
personas enfermas y seniles de su Iglesia... quería un grupo de jóvenes
bilingües en el que me pidió ayuda, pero le fallé en eso y en otras cosas, como
establecer una comunidad de la Divina Misericordia, que arruiné por mi pereza y
problemas personales que se fueron acumulando.
Pero esa es una excusa... A pesar de ello, el Padre Wal
nunca retiró su amistad de mí; Amaba a toda mi familia, incluyendo a mi perro
al que le llamaba "preciosura".
Rezamos juntos, fuimos a restaurantes juntos, me llevó a
algunos de sus lugares favoritos para contemplar las cosas hechas por el
hombre, hablamos mucho sobre la crisis dentro de la Iglesia y disfruté de su
presencia en mi casa y al invitarnos a comer a la suya platos polacos, era
increíble.
Respecto al falso profeta Francisco, al principio no quería
escuchar nada de eso, "escríbele a Francisco si no estás contento con él"
me dijo con el ceño fruncido una vez, su disgusto hacia mí, con respecto a mi
posición con Francisco era evidente... pero lo que le llevó a cambiar de
opinión acerca de Francisco fueron los frutos de Francisco, ya que él estaba
cambiando la práctica y estaba bastante claro que tales frutos eran en contra
de las enseñanzas de Cristo.
Seguí pidiéndole a Eddy una misa en latín en su Iglesia, a
la que siempre se negaba, aunque sabía que no necesitaba la aprobación de su
obispo, pero también sabía que hacerlo abriría una lata de gusanos que no
necesitaba él, ya que el "obispo" pro-homosexual/no católico Lynch
estaba a punto de retirarse y un nuevo obispo sería puesto, él no necesitaba
que el ojo de “Mordor” de Lynch se fijara en él una vez más.
Recuerdo que un día me contó sobre algo que paso en la
Iglesia de allá una vez; una reunión de sacerdotes se llevó a cabo y un
sacerdote amigo suyo estaba allí (el padre Eddy no estaba), este amigo suyo
habló entre sus compañeros sobre cómo hacer esto y aquello todo muy católico...
bueno, sus compañeros se miraron entre sí y luego le dijeron a su amigo:
“El problema padre; es que usted cree en todas estas cosas
católicas, nosotros no...”
Eddy me dijo lo triste y preocupado que estaba ese sacerdote
amigo de él, como un pensamiento tan liberal existía dentro de la Iglesia,
"no creen en el catolicismo", me dijo que aquellos que sí creían empezaron
a ver la manera de permanecer juntos durante el horrible reinado de Judas Lynch
en San Petersburgo y cómo las voces conservadoras católicas eran aplastadas una
y otra vez por sus compañeros no católicos respaldados por Lynch.
El padre Eddy tenía una escuela de desarrollo temprano
infantil en su iglesia, Lynch cerró la escuela por la falta de ganancias, pero
un joven sacerdote no católico en la Iglesia del Sagrado Corazón, sacerdote que
bendecía parejas de divorciados vueltos a casar para ellos poder obtener la
Eucarístia, Lynch nunca cerró la escuela de ese sacerdote a pesar de que las
ganancias de esa escuela eran menores que las de Eddy, pero los amigos de Lynch
estaban siendo respaldados y los conservadores estaban siendo masacrados.
Eddy sufría mucho por un hombre (Lynch) que pagó 150,000
dólares para resolver un hostigamiento sexual gay, que desestimó la imagen
milagrosa de Clearwater y que una vez dijo infamemente que "la
homosexualidad puede ser sagrada", y sí, se refería a las parejas
homosexuales dentro de la Iglesia.
El padre Eddy era mi sacerdote, pero también era mi mejor
amigo, desearía cambiar de lugar con él para que el siga predicando sobre la hermosa
Misericordia y Justicia de nuestro Señor. Eddy amaba la Justicia, a veces
demasiado para mi gusto, y lo extrañaré mucho... Ruego que esté en el cielo
disfrutando de la cara Santa de Jesús y digo que espero, porque los sacerdotes
tienen una pequeña posibilidad de llegar al cielo, porque son juzgados más fuertes
que nadie.
La cita que Eddy más me decía a mí en cada ocasión fue:
"Ralphie, sé bueno que ya somos pocos”...
Espero que alguna vez tengas la oportunidad de tener un
sacerdote como mejor amigo, tener un Pastor y al mismo tiempo que este sea tu
mejor amigo, es un lujo que nunca pensé en mi vida obtener, pero mi Señor es
dulce y nuevamente, espero que obtengas esa gracia y sabrás de qué estoy
hablando… necesitarás un buen sacerdote cerca de ti, ya que la anti-iglesia está
eclipsando todo y el mal de hoy se siente tan bien que es muy preocupante.
Que descanses en paz mi dulce amigo, que el Señor te dé la
eternidad y Su Amor, y por favor les
pido que recen un Ave María por el alma de mi mejor amigo, el Padre. Edward Wal.
Dios los bendiga. Amén
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